Yo creo que fue más o menos a mis 20 cuando di por primera vez con el concepto de los chakras.

Estudiaba de la mano de una médica bioenergética, quien, de paso sea dicho, salvó la cordura emocional de mi madre durante un largo tratamiento contra el cáncer.

En su consultorio había piedras con propiedades mágicas, Budas regordetes, esencias florales, filtros de sintergética, y una foto de Sai Baba colgada en la pared.

No sabría explicarte cuánto me han llamado siempre la atención esas cosas.

A ver, que no te estoy pintando una charlatana.

Te hablo de una rigurosa profesional de la medicina tradicional, que además practicaba la medicina etérica y trataba a sus pacientes en su dimensión física, emocional, mental y espiritual.

Vinimos a verla por una consulta para mi madre, y yo me quedé un buen tiempo como su estudiante.

En su despacho practicábamos meditación, sanación y se reunía un grupo de investigación con otros médicos y expertos del área de la salud.

Yo era apenas una pupila, recién llegada, ávida de aprender.

Hablaban sobre temas extraños.

Extraños para la María de aquel entonces.

Extraños y fascinantes.

Un día, en una sesión del grupo de investigación, hablaron sobre algo llamado Chakras.

Piensa que de esto hace ya 20 años.

Escuché atenta, tomé nota de la bibliografía referida, y la devoré.

Me fascinó la idea de que exisitiese una anatomía energética capaz de regular los procesos del cuerpo, las emociones, la mente y el espíritu.

Me voló la cabeza saber que tenemos ciertas ruedas de energía a lo largo de nuestro cuerpo, que funcionan en equipo con el sistema endocrino, que vibran en frecuencias específicas, y que cuando están desreguladas afectan todo lo que somos.

Pero yo era una estudiante de psicología, y no podía evitar que mi mente se preguntara:

¿Será todo esto puro cuento?

En el fondo sabía que no, pero por encima me las daba de escéptica...

Fue años después de terminar mi carrera y luego de haber leído mucho, mucho más sobre este tema, cuando dí con maestros que me enseñaron cómo incorporar la terapia energética a mi práctica profesional.

Y ahí todo cambió, y gracias a ese cambio rescaté mi propósito de tratar los chakras como camino hacia un bienestar integral.

Puedes vivir con el cable conectado a tus centros de energía, y desde ahí atender lo que venga con entereza.

Nuestra anatomía energética tiene sus propios sistemas, y un cableado invisible que se recoge en ciertos puntos del cuerpo, donde forma unos vórtices o "ruedas" de energía.

Y lo mejor: tú puedes aprender a trabajar con tus chakras y como resultado vivir cosas excepcionales.

Entendí y comprobé que la anatomía energética sustenta todos tus sistemas, tu cuerpo físico, tus emociones, tu mente y tu espíritu.

¿Y si te digo que este concepto de los chakras no es tan "New Age" como suena?

Ojo, que te confieso que a mí lo New Age también me va bastante...

Pero aunque suene a magia, es un conocimiento de miles de años de sabios antiguos que enseñaron cómo usar esta tecnología de punta: tus centros energéticos.

Que sigue siendo tan actual y relevante porque es parte de nuestra naturaleza.

Lo que encontrarás en este curso son lecciones prácticas para que a tu propio ritmo estudies en ti, cómo están funcionando tus chakras, y lo que puedes hacer para recuperar su armonía.

Y eso te ayudará en muchísimos factores de tu vida...

Aquí no vas a sólo a aprender datos, aquí vas a trabajar aspectos fundamentales de tu vida con prácticas sencillas y efectivas que van a ayudarte a:

• Aumentar tu confianza
• Conectar con tu energía creativa
• Activar tu poder interior
• Reemplazar sentimientos de baja vibración
• Generar estados de calma
• Elevar tu motivación
• Ejercitar tu intuición

Son muchas las cosas que puedes mejorar cuando te adentras en este viaje por tus 7 chakras principales, y aquí lo haremos de forma cercana, simple y práctica

Tienes aquí 7 llaves maestras que si decides usarlas,

te abrirán puertas a una experiencia

de mayor plenitud y bienestar 

Fíjate, en realidad es muy sencillo.

Cuando tienes la llave correcta, sólo necesitas ponerla en la cerradura, girarla y abrir la puerta.

Claro, esto requiere que la uses, porque la llave por sí sola de nada sirve.

Es como consultar un mapa preciso antes de emprender un viaje.

Y ojo, nada en contra de viajar sin mapa...

Pero si quieres llegar pronto a un sitio, y quieres saber que el camino que recorres está validado, y quieres saber dónde vas a llegar, el mapa marca la diferencia.

Bueno, ¿y qué pasa cuando tienes la llave correcta?

Pasa que recibes un Impulso, que creces y te transformas.

Es una cuestión de adquirir información confiable y ponerla en práctica.

En este curso yo te brindo la información, la guía, y tú la ejercitas.

Vamos a hacer vibrar a cada uno de tus centros de energía 

a través de cuerpo, corazón, mente y emoción

Y lo vamos a hacer de la siguiente manera:

Te presento IMPULSO VITAL:

 
7 Llaves de Energía

Siete módulos con información y prácticas guiadas que abren siete centros de energía.
Organizados en audios para hacer a tu ritmo.
Un curso para repetir una y otra vez.

IMPULSO VITAL

7 LLAVES DE ENERGÍA

CURSO PRÁCTICO EN CRECIMIENTO PERSONAL Y ESPIRITUAL 

INSPIRADO EN LOS 7 CHAKRAS 

  $77 USD

*Pago seguro con tarjeta crédito/ Paypal / Transferencia bancaria y Pagos locales disponible en algunos países.